Tegucigalpa, Honduras.- En la búsqueda del alisado perfecto ha llevado a muchas a probar de todo: desde tratamientos con químicos agresivos hasta rutinas interminables con la plancha. Pero ahora, una alternativa más saludable —y vegana— está ganando terreno en los salones de belleza: la taninoplastia.
Esta utiliza taninos, compuestos orgánicos de origen vegetal extraídos de la corteza de árboles y de frutas que actúan desde el interior del cabello para reestructurarlo, fortalecerlo y alisarlo sin romper su fibra natural. A diferencia de otros alisados, no contiene formol ni ingredientes tóxicos.
Milton Mondragón, estilista profesional y fundador de Milton Studio, enumera los múltiples beneficios que aporta la taninoplastia: alisa el cabello de forma natural, reduciendo el frizz y proporcionando un aspecto más liso y manejable; ayuda a reparar la fibra capilar, fortaleciendo el cabello y mejorando su salud general; controla el encrespamiento, dejando el cabello suave y sedoso; y adiciona hidratación y brillo, mejorando la apariencia y vitalidad de la melena.

Ahora bien, para que el resultado sea el más óptimo, la elección del producto debe estar muy bien acompañada de una aplicación adecuada.
El experto apunta que primero se aplica el producto a base de taninos sobre el cabello. Este se deja actuar durante un tiempo determinado, generalmente media hora, para luego pasar a ser sellado con calor por medio del uso de plancha, “esto para activar los taninos, logrando un alisado temporal”, describe.
Finalmente, se coloca una mascarilla hidratante que potencia el resultado.
Postratamiento: cuidados a seguir
Los resultados tras la primera lavada y en los días posteriores también dependerán, en gran medida, de:
Productos sin sulfatos. Es idóneo utilizar champús y acondicionadores sin sulfatos para prolongar la duración del tratamiento.
Menos plancha. Reducir el uso de herramientas de calor, como secadores y planchas, ayuda a mantener el cabello sano.

Hidratación. Aplicar mascarillas hidratantes regularmente puede ayudar a mantener la suavidad y el brillo del cabello.
Sin plancha. Durante el proceso, el tratamiento se activa con calor, pero una vez finalizado no es necesario estar alisando el cabello todos los días. El resultado se mantiene con el secado habitual.
Progresivo. La taninoplastia no deja el cabello completamente lacio desde la primera aplicación en todos los casos. Su efecto depende del tipo de hebra, lo que permite un resultado más natural y personalizado.

¿Mejor que la keratina?
“A diferencia del tratamiento con queratina, la taninoplastia utiliza ingredientes naturales y no contiene formaldehído, lo que la convierte en una opción más segura y respetuosa con el cabello”, subraya Mondragón.
Y en cuanto a la nanoplastia, otra opción que va ganando popularidad, el experto apunta que “si bien ambos tratamientos buscan alisar el cabello, la taninoplastia se enfoca en la reparación y fortalecimiento natural, mientras que la nanoplastia utiliza tecnología de vanguardia”.